¿Por qué los argentinos cada vez deciden más realizar sus compras tecnológicas durante un viaje al exterior, ya sea una computadora, un teléfono o cualquier tipo de gadget que pueda ser pasado por la aduana como propio? Acá te damos tres puntos claves que explican éste fenómeno.
- Los precios relativos son inmensamente más caros, desde lo más básico hasta la gama alta. Podemos dividir los productos caros en dos ramas, los que son caros porque los impuestos de aduana son muy altos o bien aquellos productos “Hecho en Argentina”. Un dato curioso es que esos productos fueron enviados y desensamblados primero en Panamá y luego vueltos a ensamblar en el sur argentino, y todo el viajecito encarece el producto. ¿Cuán grande es la diferencia de precios? La mayoría de los productos en Argentina están el doble o más que afuera. Por ejemplo: una notebook HP G6240, que es un dispositivo de gama baja en Argentina lo podemos encontrar con suerte a AR$7.000, mientras que en Amazon, la encontramos a US$170, o sea, no llega a los AR$4.000. En casi todos los productos que comparemos podemos encontrar una brecha mínimo del 50% en comparación con Amazon.
- La oferta es mucho más reducida que en otros países, a la hora de comprar algo nos vemos con pocas opciones. Esto pasa un poco desapercibido, pero es así, y que uno de los factores que hace que esto ocurra son justamente los impuestos, aquel comerciante que importa los productos no puede darse el lujo de traer una variedad muy amplia, básicamente por los impuestos aduaneros. Y los productos “Hecho en Argentina” también son caros en definitiva. Esto impide que haya una buena oferta de productos. En cuanto a smartphones Best Buy México tiene 253 dispositivos a la venta, mientras que en su web, el negocio que más dispositivos publicados tenía era Frávega, con solo 100 dispositivos.
- Muy poca gente sabe lo que necesita en una computadora, ni siquiera los vendedores en los locales se molestan por saber qué es lo que venden, y en la mayoría de los casos en las páginas web las especificaciones técnicas son incompletas. Esto genera, en primer lugar, que el usuario que no entiende y no se le explica termine comprando cualquier cosa, sin saber si eso va a satisfacer sus necesidades, y en segundo lugar el que sabe lo que quiere, desista por falta de información sobre lo que está comprando.
En definitiva la política con respecto a este tema es un fracaso. Las clases medias y altas en la mayoría de los casos prefieren realizar sus compras mientras se encuentran de viaje en el exterior, debido al precio más bajo, la amplia oferta y la calidad del servicio de venta, mientras que las clases que no pueden acceder a un viaje, no pueden acceder a los precios bajos del exterior y tienen que comprar tecnología mala o vieja y cara, o directamente no comprar.